Para el registro
Preocupación de editores en Ecuador
La Asociación Ecuatoriana de Editores de Periódicos (Aedep)
emitió un comunicado público titulado 'En defensa de
la democracia', cuando se cumple el primer año del gobierno
de Rafael Correa, que se ha caracterizado por la confrontación con
los medios de comunicación y los periodistas. Según informa
la agendia DPA, el comunicado puntualiza, contra lo afirmado por Correa,
que los periodistas no son actores políticos ni aspiran a serlo.
"No es papel de los medios halagar al gobierno de turno. El periodismo
profesional debe guardar siempre una distancia crítica que permita
denunciar y vigilar, expresar puntos de vista divergentes, analizar, opinar
de manera argumentada, sin que ello signifique sustituir a otras instancias
sociales o políticas", señala el documento publicado
en las primeras planas de los periódicos miembros de ese gremio.
El comunicado insta a crear un ambiente que sustente "una relación
madura entre el gobierno y los actores sociales en defensa de la
democracia".
Muere en Guatemala periodista “insolente”
El periodista guatemalteco Hugo Arce, conocido por sus polémicas columnas
de opinión publicadas en varios medios locales, ha sido hallado muerto
en la habitación de un hotel del sur de la capital. Álvaro
Matus, jefe de la Fiscalía de Delitos contra la Vida, explicó
que "se presume que murió de un disparo de arma de fuego en
el pecho", aunque hasta el momento carecen de "mayores detalles
del hecho".
Arce, de 56 años, se dedicaba en la actualidad a escribir columnas
de opinión en la revista 'Y Qué', una
publicación caracterizada por utilizar un lenguaje fuerte e irreverente
sobre personajes públicos del país.
José Eduardo Zarco, fundador de la revista 'Y Qué',
ha declarado que Arce fue invitado a escribir en ese medio "porque
en Guatemala hay que ser insolente, y él lo era".
En diciembre pasado, Sandra Torres de Colom, esposa del presidente Álvaro
Colom, anunció que iniciaría un proceso penal en contra de
Arce por injuria y calumnias.
Recordaron a Cabezas a 11 años de su asesinato
Familiares y amigos de José Luis Cabezas, asesinado hace 11 años
en una cava de General Madariaga, lo recordaron el viernes pasado (25 de
enero) con varios actos.
Gladys, hermana de Cabezas leyó una declaración en la que le
exigió “Justicia a la justicia". También
repudió la liberación de varios de los condenados por el crimen.
Y siguió: "Mi hermano debería haber vivido hasta su vejez,
disfrutado de su vida, sus padres, sus hijos... nunca debió haber
sido un caso".
José Luis Cabezas, que era fotógrafo de la revista Noticias,
fue asesinado el 25 de enero de 1997 cuando estaba cubriendo la temporada
para ese medio. Tras una reunión social en la casa de un empresario,
Cabezas fue secuestrado por delincuentes que lo asesinaron y quemaron dentro
de su auto.
Por el crimen fueron condenados a cadena perpetua tres ex policías
(Gustavo Prellezo, Sergio Cammaratta y Aníbal Luna), los cuatro
delincuentes conocidos como los Horneros (Horacio Braga, Sergio Gustavo
González, José Luís Auge y Miguel Retana) y el jefe
de custodia del empresario Alfredo Yabrán, Gregorio Ríos.
También fue condenado luego el ex comisario de Pinamar Alberto
Gómez, acusado de haber liberado la zona para que se perpetrara el
homicidio. Además, Yabrán fue señalado como el posible
promotor del homicidio, pero el empresario se suicidó en una finca
de Entre Ríos cuando estaba siendo buscado por la policía.
El Tribunal de Casación bonaerense rebajó las penas de la
mayoría de los condenados, pero después la Corte provincial
ratificó las penas originales, por lo que varios de ellos debían
volver a prisión. Sin embargo, por una serie de acciones legales pudieron
mantenerse en libertad. Por ello la familia Cabezas y los colegas de la
víctima siguen exigiendo justicia.
Uchuraccay : Noticia de un Desencuentro
Un cuarto de siglo después de ocurrida la masacre que hizo nacional
e internacionalmente conocida la localidad peruana de Uchuraccay, los
especialistas todavía no se ponen de acuerdo en qué significa
su nombre. Una versión dice que equivale a “mujer
ardiente”. Otra, a “casa en ruinas”. Como
fuere, lo importante es que el 26 de enero de 1983 en las alturas de la comunidad
ayacuchana de Uchuraccay (provincia de Huanta), ocho periodistas y su guía
fueron brutalmente asesinados en un trágico desencuentro cultural
y social..
Una Comisión investigadora, presidida por el novelista Mario Vargas
Llosa, concluyó que los comuneros confundieron a los periodistas con
un destacamento de Sendero Luminoso que venía a
“escarmentarlos”. Por eso, les habrían dado
muerte “sin que mediara un diálogo previo, y por una multitud
a la que el miedo y la cólera, mezclados, enardecían y dotaban
de una ferocidad infrecuente en su vida diaria”.
Se dijo en contra de estas conclusiones que militares disfrazados de comuneros
habían participado del linchamiento. Los deudos nunca se conformaron
con lo que concluyó la Comisión Vargas Llosa y, para peor,
en los meses que siguieron Sendero ingresó a Uchuraccay asesinando
a los comuneros.
A 25 años de la tragedia, el antropólogo Juan Ossio, integrante
de la Comisión Vargas Llosa, se reafirma en las conclusiones vertidas
en dicho informe, y en la teoría de que los periodistas fueron enterrados
boca abajo ante la convicción de que habían tenido vínculo
con el demonio.
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